Victorias; Dos consecutivas tras seis meses. Sufrir hasta el final ya es una costumbre



Con el triunfo, Peñarol "escondió" una cantidad de problemas que hicieron que su imposición ante Central fuera muy dificultosa

Ganó Peñarol. Apretado, como lo indica el score. Tanto que, pese a que tras dos cambios que hizo Púa, dándole entrada a Braian Rodríguez y Martinuccio, quienes al poco rato de estar en la cancha metieron un gol cada uno, ya en el cuarto de hora final llegó a ir venciendo por un 3 a 1 que era un resultado parcial "mentiroso", podría parafrasearse con lo dicho días atrás por "La Brujita" Verón luego del triunfo de Argentina sobre Uruguay, al aludir a la inestabilidad imperante en la selección albiceleste en torno a la situación de Maradona, para concluir que, más que ganar, Peñarol anoche "barrió para abajo de la alfombra".

Esto es: en el primer tiempo el trámite se hizo abierto, sin tanto vértigo, pero similar al de River Plate- San Lorenzo, porque Central salió a jugar prácticamente con tres puntas y Peñarol, muy estirado en la cancha, dejando espacios enormes entre sus líneas y sus jugadores, no pudo tomar fácilmente contacto con la pelota.



De ese modo hubo pasajes, como al principio, en los que el conjunto palermitano dominó el campo y también el manejo del balón, mientras que el elenco aurinegro, sin peso arriba, con poca contención en el medio e inseguro en el fondo, llegó solamente cuando se encontraron Olivera, Pacheco y Ramis, como en la jugada en la que, ante un remate del artiguense, Fernández se metió un gol en contra.

Es más, en los 45` iniciales, tuvo más situaciones para convertir el cuadro de Trasante que el de Púa, al que en más de una ocasión "le salvó la petisa" Sosa, aunque se quedó -como toda la zaga- en la pelota quieta con la cual Espiga, de cabeza, anotó el 1 a 1.

Para el complemento, Braian Rodríguez entró por Ramis, que se lesionó, y al poco rato salió Alonso, que no había podido aprovechar un par de chances favorables, para permitir el ingreso de Martinuccio. Entonces, en un lapso relativamente breve, el argentino con muy buena maniobra y el salteño con un cabezazo oportuno tras un anticipo ofensivo del propio Martinuccio, dio la sensación de que -con Central más estático que en el primer tiempo- Peñarol se había asegurado la victoria.



Sin embargo, no fue así. Otra vez, cuando lo atacaron, el equipo aurinegro no fue sólido, fundamentalmente en el sector central y derecho de la retaguardia, y con la llegada del gol de Da Luz se acabó lo del resultado "mentiroso".

Realista, al fin y al cabo, Púa puso a Bajter por el "Pollo" tratando de nivelar el mediocampo y, no sin zozobras, consiguió que su cuadro mantuviera esa ventaja más acorde a lo que fueron los 90`.

Con huecos en el fondo, sin mucha contención en el medio, con generación de fútbol cuando la pelota pasó por los pies de Román, Pacheco y el "Pollo", y más explosivo y agresivo arriba cuando entraron Rodríguez y Martinuccio, anoche Peñarol, más que ganar, barrió para abajo de la alfombra.



La estrella Marcel Román: Parejo, prolijo, equilibrado, trajinó mucho pero con orden, pasó con precisión y gestó el gol de Martinuccio.

Si bien no tenían ese fin, las pizzas que llegaron al vestuario de Peñarol (para la recuperación de hidratos de carbono) tras el partido sirvieron para festejar una segunda victoria consecutiva, algo que el equipo no lograba hacía seis meses. Además, teniendo en cuenta la llegada tarde de algunas incorporaciones, las lesiones, el cumplimiento de algunas sanciones y el cambio de técnico en la tercera fecha, los carboneros bien podrían festejar pasar la mitad del Apertura encontrándose a escasos dos puntos de los líderes.

Claro que no todo era felicidad. Es que si bien se consiguió la victoria, que era vital para seguir en carrera por el título, nuevamente Peñarol sufrió en los últimos minutos tras un descuento del rival a falta de cinco minutos. "Es lo que nos está preocupando, en realidad. Nos está pasando en todos los partidos eso de sufrir hasta el final, cuando tenemos todo para liquidarlos. Pero no lo cerramos a tiempo y terminamos siempre sin la tranquilidad que necesitamos y queremos", admitió Marcel Román, nuevamente figura de los carboneros.

"Sé que estoy volviendo a mi nivel y eso me pone contento. En el pase de gol, sé que eso es más para el "Tony" (Pacheco)
, pero bueno, uno trata de ayudarlo...", contó acerca de la notable habilitación que terminó con el gol de Alejandro Martinuccio, el 2-1 parcial.

El partido dejó en filas carboneras varios aspectos positivos, más que nada a nivel de números, pero también los hubo negativos. Uno de ellos es que el delantero Jhonatan Ramis debió salir en el entretiempo y su lesión en el cuádriceps será evaluada en la jornada de hoy.

En contrapartida, retorna a los trabajos esta tarde Gastón Ramírez. El volante mejora de su esguince de tobillo, aunque todavía no se ha confirmado si estará a la orden el martes, contra Rampla Juniors.

SOLIDARIDAD. Los jugadores de Peñarol salieron a la cancha con un cartel en el que solicitaron colaboración para Andrés y Facundo, dos jóvenes afectados en la explosión del barrio Buceo de público conocimiento. El primero de los chicos es jugador de la Séptima división. Las cuentas abiertas en el BROU son las 198/418159 y 198/48167/9.