No prosperó un acuerdo entre Wanderers y Peñarol, por eso Mathías Corujo




La puerta quedó entornada No hubo acuerdo entre Wanderers y Peñarol por el pase de Mathías Corujo

No prosperó un acuerdo entre Wanderers y Peñarol, por eso Mathías Corujo seguirá siendo un "bohemio", al menos por ahora. Las partes en la negociación quedaron lejos según se supo tras la reunión mantenida ayer poco después del mediodía entre el representante del jugador, Edgard Golarte, el vicepresidente de Peñarol, Edgar Welker, y el gerente deportivo aurinegro, Osvaldo Giménez, en el Palacio Gastón Güelfi.

En la tarde del jueves se habían reunido Golarte y el presidente de Wanderers, Guillermo Raggio. Allí se le hizo saber al representante de Corujo que los bohemios pretendían 90.000 dólares más un 30% en una futura venta del jugador desde Peñarol. Y ayer Welker y compañía dejaron claro que esas cifras están bastante lejos de la propuesta que tenía Peñarol: un porcentaje en una futura venta -que no sería mayor al 15%-, una suma de dinero "bastante inferior" a la pedida por Wanderers y la cesión a préstamo de algunos futbolistas, opción que fue desechada por los bohemios.

En resumen, la negociación cayó aunque desde el lado de los del Prado, las puertas no se cerraron porque afirmaron estar dispuestos a seguir negociando. Es entendible, porque al final de la temporada se vence el contrato de Corujo en Wanderers y su ida puede no reportarle ganancia alguna a la institución.

Sin embargo, todo indica que Corujo podría llegar a Peñarol recién en seis meses. "Es muy difícil negociar en las condiciones en las que están los mercados. Lamentablemente no hay mucho margen de maniobra", asumió Golarte, quien dijo haber llegado con optimismo a la reunión a pesar de conocer que había una diferencia entre las partes.

Welker se había comunicado en la mañana con Raggio para comunicarle oficialmente el interés de Peñarol y de alguna manera pedirle permiso para encarar formalmente la negociación porque, a esa altura, las condiciones para el pase de Corujo a Peñarol se consideraban propicias. Ya estaba "hablado" un contrato a tres años, algo que pretendía el representante del jugador. Incluso, el técnico aurinegro, Diego Aguirre, se había comunicado con el lateral para comunicarle su intención de tenerlo en el plantel en las próximas horas.

Las puertas no se cerraron, pero se entornaron y Corujo sigue siendo un bohemio.
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