"Es una cancha complicada, históricamente, que incomoda a los grandes. Ni a Peñarol ni a Nacional les gusta jugar en Jardines y lo digo también por experiencia, porque lo viví jugando en Nacional". Por ese final de la frase, porque lo vivió, Diego Perrone es una voz autorizada para hablar de la salida que Peñarol deberá afrontar mañana a las 15:30 por Maroñas.
Y es verdad que los aurinegros mandan en el historial de enfrentamientos ante Danubio en su cancha, pero el margen es bastante más acotado que cuando se enfrentan en el Centenario. De 26 partidos jugados en Jardines, Peñarol ganó 13, Danubio diez y hubo tres empates (todos 0-0). Además, las victorias más cómodas en el marcador para Peñarol fueron de apenas 2-0.
"Para nosotros es la última chance de clasificar a una copa; y esta chance la vamos a jugar en casa, en lo que es un acierto de Danubio, porque todavía este Peñarol no ha salido del Centenario y eso puede influir, más allá del campeonato excelente que están haciendo", analizó Perrone.
Del otro lado, los jugadores de Peñarol mantienen la postura que salir del estadio no influirá y, es más, que en este caso Peñarol puede sacar una ventaja. "Salir del estadio no es perjudicial para nadie, por el piso. Jardines creo que tiene uno de los mejores pisos del país y se presta mucho más que el estadio para practicar el fútbol que hacemos nosotros", explicó Darío Rodríguez.
Lo cierto es que la "presión" con la que llegará Peñarol a Jardines depende del resultado de esta tarde en el Parque Central. Si Nacional gana, Peñarol deberá ganar mañana para asegurarse la Anual y para eso jugará con Sebastián Sosa, Aguirregaray, González, Guillermo Rodríguez, Darío Rodríguez, Marcelo Sosa, Orteman, Urretaviscaya, Ramírez, Pacheco y Martinuccio. Si Nacional deja puntos, Diego Aguirre le daría descanso a algunos de los habituales titulares porque la Anual estaría prácticamente asegurada.
Para Sergio Markarian, en cambio, el panorama es más complejo. Jugándose ante el campeón del Clausura una de las últimas chances de clasificar a Danubio a la Copa Sudamericana, seguramente jugará con Goicoechea, Pablo Míguez, Marcelo Rodríguez, Ferrón, Diego Fernández, Sebastián Píriz, Porras, Nicolás Díaz, Grosmüller, Recoba y Mena.
Aurinegros van por calle Carlos Nery
La Jefatura de Policía de Montevideo envió un comunicado en el que exhorta al público a asistir con la suficiente antelación para no provocar aglomeraciones minutos antes del encuentro, teniendo en cuenta que el dispositivo de seguridad implementado prevé cacheos en todas las puertas de acceso a Jardines del Hipódromo y control selectivo de espirometría, siendo el máximo permitido 0,50 grs. de alcohol por litro de sangre.
Los hinchas de Peñarol, que agotaron las entradas dispuestas para ellos el jueves en 40 minutos, llegarán por la calle Carlos Nery, desde Camino Maldonado. Asimismo, se informó que habrá un servicio especial de ómnibus en esa intersección.
Aquellos hinchas que desean ingresar banderas y elementos de percusión pueden hacerlo hasta las 13.30, dos horas antes del inicio del encuentro. Se puede llevar radios con hasta dos pilas "chicas", termo y mate.
CAMARADERÍA. El jueves a la noche los dirigentes de Danubio y Peñarol disfrutaron de un asado en la Hostería del Lago. A instancias de los franjeados, dirigentes de ambas instituciones se reunieron para hablar en un clima más distendido que lo habitual y formal. Las delegaciones estuvieron presididas por Arturo Del Campo y Juan Pedro Damiani, que tras la comida intercambiaron camisetas, igual que los jugadores.
Grato recuerdo aurinegro.
Se cumplieron 13 años del clásico del 8 contra 11. Aguirre y Goncalves, DT y asistente actuales, jugaron ese partido.
