De clásico a clásico pasaron 24 días. Fue el tiempo de inactividad de Antonio Pacheco hasta la final del miércoles. El capitán jugó 67 minutos y luego explicó que el cambio "era algo que, de alguna manera, estaba previsto". Esta vez no influyó en el juego, ni siquiera en su especialidad: las pelotas quietas.
"Ellos fueron superiores. En los momentos en los que estábamos tomando el ritmo del partido hicieron los goles y eso fue lo que determinó el resultado", analizó Pacheco.
El "Tony" fue protagonista de la jugada más polémica. Con el partido 1-0, cayó en el área por un empujón de "OJ" Morales que Jorge Larrionda desestimó. "El penal fue claro, pero no es excusa. Yo tengo que dedicarme a jugar, no a hablar de los árbitros", opinó.
Como capitán, se lo vio "retar" duramente a Ramírez una vez que el juvenil, amonestado, tiró la pelota afuera con el juego detenido. Y también a Urretaviscaya luego de una decisión desacertada en medio del juego. Ahora, será uno de los encargados de "levantar" al grupo. "A principio de año nadie pensaba que íbamos a tener dos oportunidades para ganar el Uruguayo. Perdimos una y quedamos 0 a 0. Si te remontás más en el tiempo ¿quién decía que íbamos a llegar hasta acá?", se preguntó.
Enojo por el penal que no cobró
En Peñarol quedó mucha molestia con el arbitraje de Jorge Larrionda, por la jugada en la que no cobró penal sobre Pacheco. "No es excusa por haber perdido una linda posibilidad de ser campeones, pero estamos cansados de esta reiteración de fallos garrafales de Larrionda en los clásicos, siempre en perjuicio de Peñarol. Sigo sosteniendo que es un gran juez, el mejor árbitro del país y ojalá que tenga un gran Mundial porque nos representará a todos, pero a esta altura esperamos que se dé algo que leí en algún diario la semana pasada sobre su posible retiro después del Mundial", afirmó el vicepresidente aurinegro, Edgar Welker. "Peñarol no tuvo una buena noche, pero ese penal, clarísimo, fue con el partido 1-0. Tal vez, de cobrarse como debía, el final hubiese sido otro", sentenció Welker.
