Volvio el Pollo Ruben Olivera a Peñarol // Martes 25 Agosto de 2009



El "Pollo" volvió por la revancha y la selección
Olivera hizo la "gran Verón" que anhelaba la Directiva de Peñarol

El sueño de los dirigentes -y seguramente de la mayoría de los hinchas- de Peñarol se hizo realidad ayer, cuando al caer la tarde Ruben Olivera firmó el contrato que lo vincula con Peñarol por toda la temporada 2009/2010. "Vengo porque me sentí muy bien acá y llego con más ganas que la primera vez", afirmó Olivera luciendo la camiseta de Peñarol que le entregó en el Palacio Gastón Güelfi una gloria: Ruben Paz.

"El `Pollo` ha sido un jugador tan desequilibrante, que no ha habido diferencia tan grande entre dos equipos (hablando de Peñarol y Nacional, claro) como cuando estuvo él", afirmó el presidente de los carboneros, Juan Pedro Damiani, en la presentación oficial del volante, que mañana se pondrá a las órdenes de Julio Ribas. Además, Damiani comparó la vuelta de Olivera con la de Juan Sebastián Verón a Estudiantes de La Plata, es decir, dejando de lado las fortunas que se pagan en Europa en busca de gloria deportiva.

"Allá estaba quieta la cosa y me cansé de esperar. Además, todos saben que tenía ganas de volver a Peñarol, porque fue siempre el primero en irme a buscar", dijo el "Pollo". Si bien Olivera dejó en claro que es hincha de Danubio, afirmó que volvió a Peñarol en busca de una revancha tras perder el Uruguayo dos temporadas atrás. Y sobre todo, en busca de recuperar un lugar en la selección uruguaya.

Repitió su arrepentimiento por alejarse de la "celeste" cuando empezaba el ciclo Tabárez y aseguró que su gran objetivo es volver. "Lo que me pasó con la selección es una de las cosas que más me ha dolido en los últimos tiempos", admitió el volante.



Damiani dijo en la presentación que esta es "la frutilla en la torta", sin embargo, Olivera dijo "la frutilla en la torta" será cuando Peñarol levante la copa del Uruguayo. El presidente carbonero resaltó que la llegada de Olivera se dio especialmente por la voluntad del jugador que, trascendió, no era la misma que la de su representante, Francisco Casal. "Hice lo que quería, pero no desobedecí a nadie. Nadie me dejó a mí ni yo dejé a nadie", insistió Olivera sobre su supuesto alejamiento de Casal. Lo cierto es que volvió. Y la ilusión de los hinchas crece.